En este presente… distópico, un concurso de tele realidad tiene la mejor audiencia. Como en todos los presentes. Los protagonistas son jóvenes con problemas estructurales de personalidad causados por conflictos con sus progenitores: Dependemos de nuestros padres, somos una proyección de ellos. Podríamos estar encerrados en un manicomio, o en el limbo, o entre estas cuatro paredes. Nuestra historia sería la misma. Convertimos el drama real en espectáculo televisivo. Convertimos el programa de televisión en una propuesta teatral. ¿Participas?