Cuando a alguien se le tambalean todos sus puntos de apoyo vitales, puede que su confianza en sí mismo y su equilibrio emocional se vengan abajo, con consecuencias totalmente impredecibles. Eso es, precisamente, lo que le sucede a Héctor Nevares, protagonista de esta historia. Él es un conocido novelista inmerso en una profunda crisis creativa y sentimental que acaba obsesionándose por construir una trama que le rescate del olvido como escritor. Pero la obsesión conduce al peligro, peligro para uno mismo y para los demás. Persiguiendo sombras no es una obra de héroes ni de villanos en un sentido estricto. Es, simplemente, un reflejo de las miserias, pequeñas o grandes, que caracterizan al ser humano, un relato protagonizado por personajes de características reconocibles, cuyo comportamiento se transforma en un momento determinado como consecuencia de hechos aparentemente cotidianos. En definitiva —y esto es lo verdaderamente aterrador—, lo que intenta reflejar esta novela es que nunca se sabe cuándo ni por qué razones o circunstancias cada uno de nosotros podríamos dejar de comportarnos de pronto como «personas normales» para dar a nuestra existencia y a la de los demás un giro de 180 grados.