En medio del caos Zalamgar, el Archimago entreteje nuevas intrigas, capaces de sembrar dudas y discordia en los corazones dolientes, para propagar falsas esperanzas de redención y salvación. Por su parte, Yurak siente que el silencio y la prudencia, se convierten en mordazas que le impiden frenar el avance de Argula. Mientras magos y guerreros dividen sus fuerzas para asegurar la capital y brindar apoyo en la batalla que se librará en el norte, en el corazón del Reino Humano la traición cobra fuerza y los planes de Seltar avanzan imbatibles. Las intrigas y la guerra llevaran, no solo a Yurak y a sus amigos, sino a todos en Ormuz, a transitar por caminos desconocidos, velados por las sombras de la incertidumbre e iluminados de vez en cuando por el fuego de l odio y el brillo de los aceros desnudos. Para el momento en que las evidencias revelen la verdadera naturaleza de los adversarios, los Jaguares Celestes se verán obligados a cruzar un punto sin retorno, en el que el dolor de las perdidas y la furia de las armas, repicaran en sus corazones con la fuerza de las campanas, que lanzaran al viento, con sus voces de bronce, amargos lamentos de tristeza y venganza.