KABUKI
- Autor: Franky De Varona
- Género: Poesía
- ISBN: 9798390306420
- Nº Páginas: 107
- Encuadernación: Tapa blanda
- Formato eBook: PDF
- Año: 2023
La poesía de Franky De Varona ha ido alcanzando con el tiempo su “definición mejor”, para decirlo con palabras de José Lezama Lima, uno sus autores de cabecera. Los mundos expresados en este libro no son el resultado de una imaginación desbocada. Cada una de las visiones del poeta se encuentra respaldada por hechos vividos con intensidad. No es necesario indagar por las anécdotas que se encuentran detrás de cada texto. La autenticidad de una escritura se verifica en su capacidad para ocasionar resonancias en el espíritu de sus lectores. Es imposible leer estas páginas sin sentirnos tocados en lo más profundo.
Kabuki es un libro desolador y esperanzado. Su autor remueve sin miramientos los dolores que han atenazado su existencia, pero, de igual manera, sabe mostrar las puertas que nos abre el fracaso. Franky De Varona es un hombre que ha comprendido a la perfección una lección fundamental: Los obstáculos del cotidiano vivir, más que un impedimento para continuar, constituyen en sí mismos el camino. ¿Qué otra cosa es la vida, sino una sumatoria de resistencias y oposiciones contra las cuales hay que luchar con tenacidad y coraje?
El dolor de existir se vuelve un poco más tolerable cuando lo asimilamos como una representación. La vida como un juego de roles donde a cada individuo le corresponde desempeñar un papel. Todo parece estar contenido en un guión cuya escritura no podemos rectificar. Sabemos que la realidad es otra, pero conviene organizar los hechos en determinados algoritmos. De otra manera no sabríamos cómo aceptar la intrincada red de acontecimientos que nos envuelve. Una de las funciones del arte es, precisamente, dotarnos de instrumentos que nos ayuden a comprender o, por lo menos, tolerar la temible aleatoriedad de los eventos que nos rodean:
Reloj de arena, crucigrama cósmico
que no comprendo
y me empina como un papalote,
una lluvia de azares que llevo dentro
y flotan como huéspedes en la memoria.
Esta “lluvia de azares” no sería soportable si no buscamos algún principio ordenador que le confiera una necesidad al caos, ya que resulta imposible dominar las leyes que mueven a las personas y objetos que se desplazan a nuestro alrededor. Es por ello que nos parece tan afortunada la metáfora teatral. La vida como un escenario donde venimos a representar un papel contenido en un guión inalterable:
No sé si él soy yo o si soy
el verdadero rostro
o si los dos somos la sumatoria del otro
que como máscaras en un teatro Kabuki
se observan entre mímicas
desde el otro lado.
No quiere decir que, por el hecho de que vengamos a encarnar un determinado personaje, nuestra interpretación se realice desde una mansedumbre despojada de resentimientos “en un teatro repleto de caras impuestas”:
A veces sentimos el escalofrío de la noche
y Dios observa desde un bar
el ruidoso teatro de lo que somos.
Otro de los ejes discursivos de Kabuki es la institución de la soledad. Una soledad que no es juzgada como instancia terrible o dádiva anhelada. En estos poemas la soledad adquiere una dimensión ontológica. Es algo más que un estado del espíritu. Podríamos decir que la soledad llega a adquirir la consistencia de un objeto que podemos sopesar y, por ende, compartir. Aquí reside una de las mayores virtudes de este libro. El sujeto lírico de Kabuki es un individuo consciente de que proximidad no es sinónimo de compañía. Dos cuerpos pueden entrelazarse en un vértigo de caricias insondables y, luego del paroxismo, regresan a las cerradas cifras de sus impenetrables individualidades:
En esta disputa totalitaria
de ver quién es quién
me zambullo en la bitácora del tiempo,
le tiendo la mano
en un intercambio de soledades.
El poeta reconoce que la plenitud del acto amoroso no erradica por completo el solipsismo consustancial a la naturaleza del hombre-poeta:
Ni las manos deshabitadas por el estío
en busca de otras soledades
en el cataclismo que provoca
la finitud de un cisne negro.
Y es, justamente, el encuentro de los cuerpos en la intimidad del gozo, otro de los ejes que articulan la poesía de De Varona. Sin embargo, estos versos no se detienen en una mera relatoría de los avatares del placer. El poeta sabe conectar sus aventuras corporales con una amplia panoplia de referentes culturales que enriquecen la plasmación de sus exploraciones vitales:
Las esquirlas profanan
los cuerpos ausentes
mientras mi brazo atisba
debajo de la almohada
y caigo de cabeza en los abismos
como un Karamazov.
Kabuki es un poemario metafísico y existencial que extrae la belleza de las cuarteaduras del espíritu y los abandonos más dolorosos. Un libro de belleza desoladora y para nada complaciente. Una belleza incómoda y difícil de apreciar, como un vino largamente añejado.
José Luis Serrano
Cuba, marzo de 2022