La novela transcurre en la Argentina de los años 60. Narra la historia de un grupo de jóvenes, entre los cuales se cuenta el narrador, embanderados en su origen en la extrema derecha y que terminan, al cabo de los años -apasionados, ambiciosos e inexpertos- comprometidos con movimientos de extrema izquierda. La historia intenta, a la vez, representar los desencuentros y desbordes políticos de los argentinos de esos años, sus conflictos reales y aquellos artificialmente provocados para convertirlos en banderas de lucha por el poder. Y de qué manera los mismos anticipan los trágicos sucesos de la década siguiente. La novela también cuenta las experiencias individuales de esos jóvenes y sus familias, que van determinando el destino que los une primero y los separa después. Describe de qué manera, con el devenir de los acontecimientos, se esfuman dentro del grupo original las lealtades más elementales, cómo se disuelven amores, amistades y pasiones políticas, como el humo en el aire, de ahí el título del libro. Narra la culpa que cualquier traición trae consigo y cómo ese sentimiento puede causar un insospechado acto de desprendimiento. A la vez, discurre sobre la violencia como un componente ineludible de las luchas políticas y religiosas. Ese concepto es defendido por un personaje y negado por otro, en una disputa sin desenlace.