A lo mejor resulta que las guerras nos gustan mucho, porque si no fuera así, quizá no habría habido tantas. Pero tanto si nos agradan como si no, están ahí y pueden ser objeto de nuestros dardos de humor. Si no se pueden evitar, por lo menos despojémoslas de esas falsas capas de honor, gloria y patriotismo en las que vienen envueltas y que a tantas gentes engañan; empleemos la sátira y la parodia para alertar de sus mentiras y de toda esa pomposidad con la que lo obviamente nefasto se presenta a nuestros ojos como heroico. En este libro el autor hace un recorrido humorístico por diversos aspectos del universo bélico-militar. Se ríe de lo risible, critica lo criticable y pone en solfa muchos conceptos y prácticas «solfables». Divertidos relatos de las principales guerras y originales resúmenes de grandes obras del cine bélico completan una obra corrosiva que lamenta que el paso lógico y natural del Homo sapiens de la barbarie a la civilización aún no haya tenido lugar.