Es una obra escrita en dos planos, al igual que la mente humana, se plantea en ésta narrativa realista el consciente e inconsciente de un hombre que podrá considerarse brillante por algunos y muy trastornado y débil de mente por otros. El primero de los enfoques representa la extraordinaria experiencia a que se accede a través de la magia y el misticismo de una criatura que ostenta supremacía sobre las más fantásticas creaciones de la mente humana; el unicornio. El encanto elocuente de la criatura se convierte de pronto en una nebulosa evasión por la que el protagonista pretende escapar del sufrimiento de saberse perdido en un mundo de soledad al que se aferra con la esperanza de realizar sus sueños, de cumplir las aspiraciones que reflejan en realidad toda la ayuda y amor que jamás recibió. Es un crudo retrato de lo intensas y vehementes que las relaciones humanas se pueden tornar si sus residentes son incapaces de controlar la fuerza de la impulsividad que traslada a los seres humanos desde la pasión hasta la violencia.