«El futuro de la Civilización Occidental, como el Reinado de Witiza II, se presenta “oscuro e incierto”, lleno de peligros e interrogantes, de los cuales los más importantes serían: “¿Llegaremos al choque de Civilizaciones?” y “¿Alcanzarán democráticamente los islamistas el control de Occidente, por número de votos y por masa de población?”. Indudablemente los integristas existen en todas las religiones y creencias del mundo, pero en la actualidad ese dudoso privilegio se lo están llevado los terroristas islámicos, sobre todo, tras los atentados de Nueva York, Madrid, Londres, París, etc., pero con el agravante de que están provocando que muchos occidentales opten por el mismo camino, es decir, que piensen seriamente que sólo por las armas se puede vencer a esta marea de horrores. Con ello se llegaría a un enfrentamiento entre el islam y Occidente. Por mucho que la propaganda occidental intente convencer a los musulmanes de que las distintas operaciones de guerra, emprendidas en varios países islámicos, tienen por finalidad la desaparición y derrota del terrorismo y el integrismo, una gran masa de los habitantes de países musulmanes, interpretando de cierta forma el Corán y la Sunn’ah, verán en las acciones terroristas una fase de una Yihad defensiva, puesto que personas y países islámicos están siendo invadidos por “Cruzados” occidentales.»