Un hombre corre por la orilla de la Playa de la Barceloneta. Se oye su respiración entrecortada. Está amaneciendo. A lo lejos algo choca contra las olas. ¿O son las olas las que chocan contra algo? El runner se aproxima manteniendo el ritmo; el bulto tiene forma humana. Rebaja la velocidad y se frena a pocos metros. ¿Lo es? ¿Es un hombre? Se acerca vacilante. Una figura desnuda, con una fea cicatriz en el centro del pecho, reposa sobre la arena. Las olas cosquillean sus pies. La piel parece resbalar de su cuerpo. Su rostro se contrae en una aterradora mueca donde unos ojos vacíos y unos labios morados deforman su expresión en un grito desesperado. Las imágenes se congelaron en las retinas de todo el país. La ciudad convulsionó y a Álex Dalmau, periodista del NuevaEra, le cayó el muerto de la investigación por orden de su jefe de redacción, Víctor Calleja, ‘el sabueso’. Atormentado por su decadente profesión y unas expectativas de vida frustradas, Dalmau se encontrará solo ante un caso insólito y retorcido. Un caso en el que la presión de la inmediatez informativa, el prematuro rechazo de la Sargenta Oliveira encargada del caso y las dificultades de una investigación sin fuentes que consultar, llevarán al intrépido periodista a cuestionarse sus propias artimañas y verdaderas intenciones. Porque todo vale en la búsqueda de la verdad, aunque esta le lleve a involucrarse hasta el punto de olvidar cuál es su lugar.Una búsqueda inquietante de un asesino fantasma que no deja cabos sueltos.Una historia donde todo es lo que parece y nada es lo que aparece.Un caso inverosímil y lleno de interrogantes que le empujará hasta este otro lugar en el que ellos no sospechan.