Se trata de un libro inserto en el humanismo cristiano que EDICIONES NARCEA acaba de publicar, es un ensayo teológico-espiritual, titulado: CITADOS PARA UN ENCUENTRO: ( Dios llama y espera) en el que su autor, casado y padre de tres hijos, Dr. En Filosofía , catedrático retirado, quiere dar testimonio de su fe, convencido de que es una forma de colaborar a favor de una sociedad mejor. Ya desde las primeras páginas queda patente el mensaje de que este nuestro mundo materializado anda necesitado de Dios y de que no le vendría mal la presencia del espíritu en las mil formas que él tiene de hacerse presente. El lector podrá encontrar en las páginas de este libro un itinerario que, se inicia con la constatación de una conciencia religiosa innata en la naturaleza del hombre, por más que queramos ocultarla, la cual nos lleva a preguntarnos por Dios, y nos empuja a su búsqueda. De una forma o de otra, nadie puede verse libre de un sentimiento tan arraigado en nuestra naturaleza, como nadie puede escapar a la mirada de ese Ser cálido y acogedor que nos envuelve con su presencia. El mismo Ortega y Gasset nos dice que “ no concibe que ningún hombre pueda renunciar sin dolor al mundo de lo religioso”. Siempre viene bien, más en estos tiempos e crisis religiosa, discurrir por las sendas de una teología fundamental apoyada en razones sólidas, avaladas por una larga tradición histórica. La búsqueda de Dios por los caminos de la razón y de la ciencia no es en ningún momento obstáculo para que se haga presente el Dios del corazón. Él no es solo la conclusión bien probada de una sólida argumentación racional, es también y así aparece en estas páginas, el aliento amoroso que nos da la existencia y nos mantiene en el ser. Vida de nuestra propia vida que cuando volvemos los ojos hacia nuestro interior le vemos dentro de nosotros mismos. Un día sin saber cómo ni por qué, te toca el corazón y ahí se acaba todo y comienza par ti una nueva vida. Después de haber sentido su suave presencia, no cabe ya el olvido y sólo quedan palabras para decir con Agustín de Hipona que tarde te conocí Señor de mi vida , Dueño de mi existencia. El encuentro con el Dios de la Esperanza es la más apasionante aventura que se puede vivir y así quiere dejarlo reflejado el autor de estas páginas . Por ellas van desfilando las diversas preocupaciones del ser humano en los distintos momentos de la vida. Sentido de la existencia, el mal en el mundo, el dolor , la muerte etc. Preguntas , muchas preguntas, que sólo pueden tener una respuesta en Dios. En el prólogo de este libro están escritas las palabras del conocido director del programa de T.V. E. el P. Jesús López Sobrino que dicen así: “Gutiérrez Sanz ha logrado en esta publicación una síntesis muy valiosa de la aventura humana en la búsqueda de Dios, fruto de la maduración de muchos años al calor de una vivencia cristiana que en lugar de ser narcótico y limitar al hombre, le lleva por las esencias espirituales de la vida y le adentra en las vías existenciales de nuestro mundo … nos ayuda en la feliz aventura de la fe, de la mano de los grandes conversos: Pablo, Agustín. Pascal, García Morente…Su estilo sobrio, elegante y fluido nos conduce con acierto en la difícil andadura del espíritu y nos hace partícipes de un compendio de teología viva y actual , invitándonos a ser testigos del gran don que recibimos en la fe”. Este itinerario acaba felizmente con el encuentro del Dios amoroso, capaz de saciar nuestros anhelos y dar cumplida satisfacción a nuestra vocación humana. Las tres formas en que Dios queda reflejado: El Padre Creador, que nos extiende sus largos brazos para acogernos, el Verbo Encarnado que nos habla y se hace uno con nosotros, la Fuerza del Espíritu que nos conforta. Pueden ser expresiones todas ellas que nos remiten al mismo misterio de amor. En lógica consecuencia ya no queda otra salida que la de la entrega generosa, haciendo de nuestra existencia un testimonio viviente de amor en este mundo nuestro. Ser testigos de Dios en un mundo que parece haberse olvidado de él, es la última etapa de esta apasionante y feliz aventura de citados para un encuentro. Así es el libro de este laico escrito con todo cariño, un libro con ideas y sentimientos, dictado no sólo con la cabeza sino también con el corazón