Fabricando un 'best seller'
Bel Carrasco / El Mundo
Día 28/07/2013
Dos kilos cumplidos de amor, preferiblemente escabroso y prohibido, cuarta y mitad de misterio, un buen chorro de sangre caliente y todo bien aliñado con salsa picante a base de sexo más o menos explícito. Si esto fuera la receta para cocinar un best seller, que no lo es, me la quitarían de las manos, incluso más de uno sería capaz de vender a su madre para conseguirla. Y es comprensible porque sólo a base de alcanzar la cota de los libros más vendidos los escritores logran salir de miserias. Picapedreros de las palabras, esforzados galeotes en el mar de la fabulación. El de escribidor es el oficio más solitario y peor remunerado del mundo del arte, el que exige más horas de remar contracorriente y mayores dotes creativos. No se trata sólo de escribir bien, sino de ejercer de psicólogo, sociólogo, amén de demostrar aguda capacidad de observación, memoria de elefante e ingenio a la hora de concebir personajes con vida propia y tramas que enganchen al lector.