El enemigo íntimo: la literatura del complot
Lee unas páginas del ‘Código Da Vinci’ y nota que una sombra se cuela en su vagón. Teme cruzar la mirada con el intruso pero está seguro de que le espía. Si alguna vez le ha pasado algo así, en este artículo encontrará respuestas. |
Daniel Paul Schreber, hijo de una acomodada familia sajona, desarrolló una meteórica carrera política, hasta que, hacia 1893, algo empezó a andar mal. Para aligerar el estrés de sus responsabilidades laborales, Paul empezó a frecuentar a un señor con poderes especiales y una larga barba blanca. Las cosas se pusieron complicadas cuando éste manifestó su deseo de convertirle en mujer para fecundarlo y engendrar una nueva raza, luego de una próxima hecatombe universal.
Todo esto fue apuntado en Memorias de un enfermo de nervios (1903) su autobiografía, publicada por una editorial especializada en espiritismo. Tiempo después, un psiquiatra austríaco dictaminó que el complot místico de Schreber y su travestimiento a manos de Dios no era más que un mecanismo de represión del deseo homosexual.