Juegos literarios 14 – Animaladas
Los animales son otra fuente para jugar de otro modo con la creatividad.
Lo primero que nos viene a la cabeza al tratar de animales son las historias que nos contaban de pequeños en las que los animales hablan y actúan como las personas.
La fábula es una rama literaria que cuenta historias en las que cosas y animales viven y actúan como lo hacen los seres humanos. A este tipo de textos se les añade por lo general una moraleja, son cortos y van dirigidos principalmente a niños y jóvenes. Se trata de un género didáctico mediante el cual suele hacerse crítica de las costumbres y de los vicios locales o nacionales, pero también de las características universales de la naturaleza humana en general.
La fábula clásica reposa sobre una doble estructura; dos personajes en desigualdad social: uno en posición alta y otro en posición baja y desfavorable que gracias a un evento narrativo imprevisto se ve invertida. Este esquema fue descrito por Christian Vandendorpe como "doble reenvío".
Se han encontrado ejemplo de fábulas en tablas de arcilla de la antigua Mesopotamia. En la antigüedad griega, la primera fábula, conocida como "fábula del ruiseñor", la contó Hesíodo a comienzos del siglo VII a.C. Entre las más conocidas se encuentran las de Esopo, Horacio, Fedro. También existen las fabulas de origen hindú de Hitopadesa y Pancatantra. En el Renacimiento las fábulas contaron con el interés de los humanistas; Leonardo da Vinci, y las clásicas de Jean de La Fontaine.
Otra idea sería contar la vida de un animal, puede ser un relato o incluso una novela. Algunos insignes escritores han construido grandes obras en los que los narradores son animales, algunos ejemplos serían Flush de Virginia Woolf, Tombuctú de Paul Auster o El coloquio de los perros de Miguel de Cervantes.