Grandes escritoras universales (IV)
El próximo 8 de marzo se celebrará, un año más, el día de la mujer trabajadora. Para conmemorarlo, recordaremos algunas figuras fundamentales de la literatura universal.
Las hermanas Brönte
Las hermanas Brönte son un raro caso de genialidad literaria en una misma familia, y de tesón y fuerza para lograr abrirse camino como escritoras en la sociedad victoriana del SXIX. Charlotte nació el 21 de abril de 1816, Emily el 30 de julio de 1818 y Anne el 17 de enero de 1820.
Se criaron en la casa parroquial de Haworth, (actualmente convertida en el Brontë Parsonage Museum), su vida quedó marcada por un lado por la influencia de su padre, hombre culto y poeta, y la trágica muerte prematura tanto de sus hermanas mayores, Maria Brontë y Elizabeth, como de su madre, que falleció en 1820, a los treinta y ocho años.
Las hermanas estudiaron en Cowan Bridge, una rígida institución de la época, que marcó sus vidas. En 1831, Charlotte fue confiada a la escuela de Miss Wooler en Roe Head, Mirfield, Dewsbury Moor, al sur de Bradford, tras terminar sus estudios la profesora llamó a Charlotte para que fuera su ayudante y Emily la acompañó como estudiante. En esta época Emily escribía un diario y poemas, así como los cuentos del ciclo de Gondal. Los hermanos crearon un mundo propio, el de Glass Town, Angria y Gondal.
Lord Byron fue fuente de inspiración para las hermanas Brontë, al que pudieron leer en el Blackwood's Magazine.
Charlotte tuvo la idea de fundar una escuela de jóvenes niñas en su casa parroquial, la llamarían Sunday School. Emily y Charlotte, acompañadas por su padre, fueron a Bruselas en febrero de 1842, se inscribieron en la escuela de Monsieur y Madame Heger, en la calle de Isabelle, durante seis meses. La muerte de su tía las obligó a regresar a Haworth y el padre enfermó.
En 1846 lograron publicar una antología de poemas de las tres, bajo seudónimos masculinos. Jane Eyre, de Charlotte, Cumbres Borrascosas (Wuthering Heights) de Emily y, Agnes Grey de Anne, aparecieron en 1847, bajo sus seudónimos utilizando el apellido Bell. El éxito de Jane Eyre, de Charlotte, fue inmediato, sin embargo, Cumbres Borrascosas de Emily, tardó mucho más tiempo en ser aceptada como una gran obra de la literatura universal.
Tras el éxito de Jane Eyre, Charlotte decidió romper el anonimato y viajar a Londres.
El reverendo Arthur Bell le propuso matrimonio a Charlotte, y se casaron finalmente en 1854, Charolotte murió al año siguiente.
