Vivir nuestro propio relato
Algunas personas se sienten atraídas por mundos distintos de los que les ha tocado vivir, por países, escenarios, o épocas. La literatura nos ayuda a poder adentrarnos en estos mundos de una manera directa, y sentirlos vivos. Pero para algunas personas esto no es suficiente, la llamada es tan fuerte que necesitan vivir esa realidad de forma palpable, es el curioso caso del tripulante de British Airways, Ben Sansum.
Sansum tiene 35 años y es una persona completamente normal que decidió vivir su vida privada en el entorno que le fascina: el de los años cuarenta. Para
ello, ha decorado su casa solo con objetos de la época y viste de este modo cuando no está trabajando. Tiene una vida perfectamente común, de hecho trabaja como tripulante en unos aviones que, por supuesto, no existían en los cuarenta, pero no ha renunciado a vivir del modo que le hubiera gustado.
Admite que ha hecho alguna concesión, como la nevera, que es actual, y el coche, y que su vida sentimental también sufre las consecuencias ya que no comparte hogar con su esposa, que prefiere vivir en un apartamento moderno.
Dentro de su hogar vive en 1946: su ropa, su casa, la música que escucha, todo proviene de antes de que él mismo naciera. No tiene ordenador, ni móvil, ni redes sociales, la cocina es de carbón, la lavadora es de la época y consiste en dos rodillos para escurrir. Y uno de los detalles más interesantes es la colección de objetos de la época que decoran su casa.
Su familia pensaba que la pasión, que viene ya desde su infancia, se le pasaría con el tiempo, pero no ha cesado en absoluto, y simplemente tuvo la osadía de vivir su propio relato vital.
Ben piensa que la vida moderna nos aleja a unos de otros: “Creo que estamos muy aislados, uno puede tener cientos de amigos en Facebook pero ¿sales a hablar con tu vecino?”.
Pueden darse un paseo por esta ficción contemporánea en: www.youtube.com/watch?v=N9fI40Nni3k