La voz que no cesa
Ramón Pereira y Ramón Boldú son los autores de La voz que no cesa, un cómic basado en la vida del poeta Miguel Hernández. En 2013 salió a la luz una primera edición, publicada por la editorial EDT, -con prólogo de Joan Manuel Serrat, que puso música, hace décadas, a los poemas del autor de Orihuela-, y en 2017 la editorial Astiberri publica una edición ampliada con nuevas escenas de sus últimos años en la cárcel.
Miguel Hernández nació el 30 de octubre de 1910 en Orihuela, España. En 1925 tuvo que abandonar los estudios por orden paterna para cuidar del rebaño familiar, a pesar de haber conseguido una beca para proseguirlos. Eso no le impidió ser autodidacta, gracias a la ayuda de Luis Almarcha Hernández y de sus visitas a la biblioteca pública, hasta logró crear un grupo literario. Llevaba su máquina de escribir a cuestas, en la mochila, y se dedicaba a componer sus versos mientras el ganado pacía. En 1931 viajó a Madrid y entró en contacto con la obra de la generación del 27. En 1933 publicó su primer libro, Perito en Lunas. En diciembre de 1935 murió su amigo y cómplice literario, Ramón Sijé, al que dedicó la famosa Elegía que entusiasmó a Juan Ramón Jiménez.
Al estallar la Guerra Civil, se afilió al Partido Comunista y asistió al II Congreso Internacional de Escritores para la Defensa de la Cultura celebrado en Madrid y Valencia, donde conoció al poeta César Vallejo. En abril de 1939, al terminar la guerra, huyó a Portugal fue entregado a la guardia civil. Desde la cárcel de Sevilla lo trasladaron a Madrid y fue liberado gracias a las gestiones de Pablo Neruda pero en Orihuela fue detenido y en el penal de Ocaña, en Toledo, enfermó de tuberculosis. Falleció el 28 de marzo de 1942, con tan sólo 31 años de edad.
Boldú ha intentado que las páginas del cómic muestren tanto la vida del escritor como fragmentos de su obra.