Cafés literarios (1)
Los cafés han sido, durante años, los puntos de encuentro de tertulias entre intelectuales. Uno de los más famosos es el café Les Deux Magots, situado en el barrio de del barrio de Saint-Germain-des-Prés, en el VI Distrito de París.
En 1885 Paul Verlaine, Rimbaud y Stéphane Mallarmé adoptaron la costumbre de encontrarse en lo que en la época era una casa de licores, y ya no dejó de ser lugar de encuentro emblemático en todo el SXX. Fue en 1933, con la creación del premio literario Deux Magots, que se selló su marcada vocación literaria. El café fue frecuentado por los surrealistas y posteriormente por los existencialistas. En sus mesas se han sentado, se dedicaron al noble arte de la tertulia, y escribieron artistas de la talla de André Gide, Jean Giraudoux, Pablo Picasso, Antonin Artaud, André Breton Fernand Léger, Jacques Prévert, Ernest Hemingway, Jean-Paul Sartre, Simone de Beauvoir, Albert Camus, Bob Welch o Ernesto Sabato.
El curioso nombre de Les Deux Magots (los dos magos) hace referencia a dos figuras, dos personajes chinos que forman parte de la decoración interior.