La poesía escondida en las letras de los cantantes
Que las letras de algunas canciones son también poesía no solo lo sabemos sino que las academias parecen cada vez más interesadas en reconocerlo. Prueba de ello son los reconocimientos a las letras de Bob Dylan con el Premio Nobel o el Premio Príncipe de Asturias de las letras a Leonard Cohen. Pero no solo los cantautores escriben poesía sino que en las letras de las canciones se esconde a menudo una intertextualidad fruto de las lecturas de los músicos, a veces las detectamos en los espacios menos esperados: tras la letra de la canción Te juzgarán sólo por tus errores del grupo Extremoduro se hallan las resonancias del poema de Marcos Ana, el poeta que pasó veintitrés años encarcelado por la dictadura franquista. El famoso poema Decidme cómo es un árbol termina:
22 años, ya olvidé
la dimensión de las cosas,
su olor, su aroma,
escribo a tientas el mar,
el campo, el bosque, digo bosque
y he perdido la geometría del árbol.
Hablo por hablar asuntos
que los años me olvidaron.
No puedo seguir:
escucho los pasos del funcionario.
Y la canción, que sigue la misma lógica poética acaba:
Tú arranca,
yo aprendo como aguilucho.
Vuelo a un mundo imaginario
(No puedo seguir: escucho
los pasos del funcionario)
Incluso Charles Baudelaire se cuela en el imaginario de la música heavy del grupo Barón Rojo que tituló una canción como Las flores del mal en homenaje al poeta maldito.
Poemas como la Canción del pirata de Espronceda:
Con diez cañones por banda,
viento en popa a toda vela,
no corta el mar, sino vuela,
un velero bergantín;
bajel pirata que llaman
por su bravura el Temido
en todo el mar conocido
del uno al otro confín.
que antiguamente hacían aprender en el colegio de memoria, ha dado juego a Joan Manuel Serrat que en su letra “Una de piratas” le rinde homenaje.:
Todos los piratas tienen
un temible bergantín
con diez cañones por banda
y medio plano de un botín (…)
Hasta que un día temblando
en la popa de un velero (…)
Joaquín Sabina reprodujo algunos versos completos de Espronceda en su canción “La del pirata cojo”:
Y ve el capitán pirata,
cantando alegre en la popa,
Asia a un lado, al otro Europa,
y allá a su frente Estambul.
El poeta, recién galardonado con el prestigioso Premio Loewe de poesía, José Ramón Ripoll, es autor de la letra de la canción de Sabina: Que Demasiao (Una Canción Para El Jaro).
Otro caso curioso es la canción “Hijo de la luna” del grupo Mecano:
Hijo de la luna.
De padre canela nació un niño
blanco como el lomo de un armiño
con los ojos grises
en vez de aceituna,
niño albino de luna (...)
Y si el niño llora
menguará la luna
para hacerle una cuna.
tiene ecos de El romance de la luna, del Romancero Gitano de García Lorca:
Dentro de la fragua el niño,
tiene los ojos cerrados.
Por el olivar venían,
bronce y sueño, los gitanos.
Las cabezas levantadas
y los ojos entornados.