El editor de libros
La recientemente estrenada película 'El editor de libros', dirigida por Michael Grandage e interpretada por Jude Law y Colin Firth, ha servido para poner en primer plano la labor de algunos editores insignes sin los cuales quizás algunos autores no habrían alcanzado la excelencia o el reconocimiento merecidos. Es el caso del protagonista de la película, el editor Maxwell E. Perkins que fue el descubridor y mentor de Thomas Wolfe cuando este tenía solo 29 años. La vida y obra de Thomas Wolfe, que murió a los 38 años, eran ingentes, y Perkins logró, en un labor leal y minuciosa, acotar lo suficiente al personaje para que pudiera escribir, y atajar algunos excesos de la obra de los que ya Francis Scott Fitzgerald le había advertido acerca de su novela Del tiempo y el río (1935).
Maxwell E. Perkins nació en Nueva York, en 1884, estudió en Harvard y trabajó de reportero en el New York Times, hasta que, en 1910, empezó a trabajar en la editorial Scribner, que ya había publicado nombres consagrados como Henry James o Edith Wharton, pero no le tembló la mano al apostar por nuevos talentos como el joven Fitzgerald, con tan solo 22 años. Creía en la literatura casi con devoción religiosa y en la cultura como servicio a los lectores, su mayor cualidad fue esa capacidad de ver lo que algunos manuscritos, -a menudo rechazado por otras editoriales-, podían llegar a ser, y ayudarlos a llegar hasta ahí."Aprendan a escribir leyendo", les decía Perkins a sus autores, mientras les entregaba algún libro. Sabía cómo tratar la personalidad de cada autor, permanecía calmado con Hemingway, era sensible con Fitzgerald y severo con Wolfe.