Derechos de autor y dominio público
Los derechos de autor son uno de los derechos fundamentales incluidos en la Declaración Universal de los Derechos Humanos. Fueron un gran avance para la protección de la copia en los autores y también para regular la subsistencia a través de la creación, lo que permitió a muchos autores su profesionalización. El derecho de autor es un conjunto de normas jurídicas y principios que afirman los derechos morales y patrimoniales que la ley concede a los autores por el solo hecho de la creación de una obra literaria.
Ahora bien, este concepto es relativamente reciente, su concepción no tiene más de trescientos años (en Europa se inició en 1710 con el Estatuto de la Reina Ana), y siempre se ha considerado que es una protección al autor por lo que expiran y pasan a dominio público al cabo de unos años, aunque el periodo varía según la legislación de cada país. El plazo mínimo, tras el fallecimiento del autor/a, es de 50 años, aunque en Europa se ha extendido a 70 años.
En 2016 algunos autores importantes se incorporarán al dominio público.
En España pasará a dominio público la obra de tres de los mayores escritores del SXX: Federico García Lorca (fusilado el 18 de agosto de 1936), Miguel de Unamuno (31 de diciembre de 1936) y Ramón María del Valle-Inclán (5 de enero de 1936).
La legislación de otros países permite que se libere también este año la obra del gran poeta T. S. Eliot, Premio Nobel de Literatura en 1948.
No siempre es fácil calcular la fecha, no solo por las distintas legislaciones mundiales, sino porque a veces hay otro tipo de impedimentos o maniobras, por ejemplo, el Diario de Ana Frank debería pasar ese año a dominio público, ya que ella murió en el campo de concentración en 1945 pero la Fundación Ana Frank alega que Otto, el padre, modificó el texto y por tanto se lo puede considerar coautor del diario. La polémica se complica más todavía porque hay tres versiones, catalogadas normalmente como A, B y C. La versión A fue el diario original que Ana Frank comenzó unas semanas antes de esconderse de los nazis, en 1942, la B es otro manuscrito de 1944 que ella misma reescribió, y la C es la que su padre, único superviviente de la familia, rehízo parcialmente cuando recuperó, finalizada la guerra, el manuscrito. Otto Frank murió en 1980 y eso hace que no expirarían hasta 2050. Los argumentos no son solo económicos, sino que en este caso la Fundación arguye que desea impedir el uso poco apropiado de fragmentos del diario por ejemplo en camisetas.
Curiosamente, en este 2016, también se liberan los derechos de autor de los textos escritos por Adolf Hitler y Benito Mussolini, ironías de la historia.