Editoriales independientes: el panorama después del boom
Carmen López / El Diario
Día 31/08/2014
El sector editorial no vive su mejor momento. Al menos, según los datos que en los últimos meses han dado a conocer diversas instituciones del sector. La Federación de Gremios de Editores de España declaraba en julio que la facturación, tanto interior como exterior, había descendido un 9,7% con respecto al año anterior, acumulando una caída del 19% en la última década. Según las cifras del Observatorio de la Lectura y el Libro, en 2009 la cifra de empresas editoriales en España era de 3.564 mientras que en 2014 el número había descendido a las 3.086, es decir, un 13,4% menos.
Las cifras no acompañan, pero siempre existen ejemplos de resistencia que ayudan a combatir los porcentajes negativos. Las editoriales independientes Blackie Books, Capitán Swing y Alpha Decay son algunos de ellos: las dos primeras celebran este 2014 su quinto aniversario, mientras que la tercera cumple diez años en activo. Teniendo en cuenta los datos contemplados anteriormente, tienen bastantes motivos para festejar.
El camino no ha sido fácil para ninguna de las tres, cada una con sus complejidades y diferencias. Según la experiencia de Daniel Moreno, fundador y responsable de Capitán Swing: “Son varias las dificultades. Financieramente la editorial comenzó con pocos recursos económicos y eso hace que siempre estés un poco en la cuerda floja. La propia dinámica del sector hace que seguramente sitúes a la editorial por encima de sus posibilidades en una especie de ruleta rusa constante. El trabajo editorial requiere de grandes esfuerzos económicos y en cuanto hay algún bajón de ventas hay poco margen de maniobra”. Por su parte, Jan Martí, de Blackie Books, coincide en que, en España, "se venden muy poquitos libros y hay que currárselo mucho para sobrevivir”.