HEROÍNAS FEMENINAS EN EL TEATRO DE NACHO COSÍN
MILA DE JUANES
En Calera y Chozas (Toledo) se ha realizado un ambicioso proyecto de Cultura este verano de 2021. Los organizadores han sido: El Ayuntamiento con el buen hacer de su alcalde Gabriel López-Colina, la Concejalía de Cultura bajo la excelente dirección de Ana Ribelles y el Centro de la Mujer, un equipo de notables profesionales abriendo las puertas y los ojos a las mujeres de la comarca como asesoras de todos los recursos humanos y laborales. Por otro lado, con absoluta coherencia, Protección Civil y Voluntariado, han distribuido a la perfección, las dimensiones de separación de seguridad entre sillas exigidas actualmente, el lugar ha sido en la Plaza de Isabel I de Castilla, recinto elegido para la diversión y la cultura. En conjunto hemos asistido a bailes y cantos locales, cine, y sobre todo teatro; ese arte de Talía y Melpóneme a lo cual nos tiene acostumbrados, para disfrutar, el eminente director de escena Nacho Cosín, verdadero amante del teatro; por lo que a través de él llega Cultura a este apartado pueblo de la provincia de Toledo. Como es sabido el director es la fuerza dominante de las escenas teatrales. Para lograr que la acción sea más espectáculo Nacho Cosín va creando la escenografía, el vestuario, trucos escénicos, luces, sonidos, él logra dominar el escenario ayudado por la técnica, todo eso, lo acopla perfectamente al texto. Así ha ocurrido con la puesta en escena de las Preciosas ridículas, comedia escrita por Molière en el siglo XVII. Trajes vistosos de colores brillantes con la habilidosa capacidad de actrices y actores fueron capaces de describirnos y descubrir por sí mismas/os a sus propios personajes. El trabajo en conjunto, logró que el público escuchase la pedantería de las frases emitidas por las protagonistas, Cathos y Madelon, que resultaron ser engañadas cuando su pretensión había sido triunfar en el enredo y envolver la burla. Si la comedia de Molière alcanzó un rotundo éxito, no menos podemos decir de la representación de las lecturas dramatizadas, que Nacho Cosín previamente había elegido, personajes femeninos reivindicando su derecho a ser, a través de la historia del teatro. Autores como Sófocles, Lope de Vega, Henrik Ibsen y Federico García Lorca. La heroína de Sófocles, Antígona: El rey de Tebas, Creonte, prohibió el entierro del hermano de Antígona porque se le consideró traidor a la patria. Antígona, por orgullo y dignidad, viola la ley y da sepultura a su hermano, por ello es condenada a ser emparedada viva. Antígona pone fin a su vida suicidándose. Laurencia, la heroína de Lope de Vega en el siglo VXII, es noble, idealista, capaz de luchar por lo que cree, ella no quiere ser el objeto sexual del Comendador, se rebela frente al machismo de los hombres, logrando poner a todo el pueblo de Fuenteovejuna en pie. Impactante obra dramática donde triunfan los valores de una mujer. Si el drama de Lope ha venido siendo representado con absoluto éxito a lo largo de los siglos para instruirnos en la dignidad de la mujer, no menos trascendental es la obra del dramaturgo noruego Henrik Ibsen en 1879, y que marcó un antes y un después, literariamente hablando, en el reconocimiento de los derechos de la mujer respecto al hombre. La heroína de Casa de Muñecas, Nora, es mundialmente conocida por ser pionera del feminismo literario. La obra expone con nitidez machismo frente a feminismo. Doña Rosita la Soltera de Federico García Lorca. En García Lorca el gran personaje de su teatro es la mujer y con muchas variantes, el tema de sus obras es el amor imposible. En las mujeres de Lorca, de diversa índole y condición, hay un denominador común: la frustración afectiva. Doña Rosita la soltera está enclavada en este contexto, ella siente una profunda incapacidad interna para realizarse, ve consumada su vida en un noviazgo que no termina de concretarse y no tiene otra solución que seguir esperando eternamente, con la consiguiente frustración y destrucción que ello conlleva. Todas estas emociones se transmitieron al público que aplaudió los aciertos culturales de los organizadores y sobre todo el reconocimiento de su esfuerzo al director de teatro Nacho Cosín que siempre que puede nos ofrece, desde el escenario, las posibles luces para avanzar en la historia de la cultura.