Ser poeta
Autor: Carlos Mansilla
Es tocar la luz o morir calcinado en el intento. Ordenar un rosario de palabras para desecharlas luego. Derrotar abandono y sufrimiento. Presentar batalla a los Césares del intelecto. Blandir lanzas contra la caja boba en duelo desigual . Juntar las tempestades más violentas en los mares del amor y transformarlas en amor nuevo. Quedar boquiabierto masticando arena , maldiciendo soledades en la noche más profunda… Y recomponerse en versos. Suspirar poemas temblorosos; retomar el desafío y subir en el olor a yodo hasta el mástil más alto de la madrugada. Vivir el salto de un gorrión. Ser cóndor. Tener la certeza del trigo germinado. Humillar metáforas y transformarlas en viento. Ser sombra y árbol. Agua y fuego. Navegar ríos de sonetos, redondillas, formas libres y parir al fin, el verso nuevo. Flotar en utopías, beber lluvias con el insomnio del alma a cuatro manos. Ser sangre, caliente pan de lo inmediato. Liberar el grito de la tarde en la hoja virgen del cuaderno. Desflorar el color más intenso hasta hacerlo pálido para que brille. Ser instinto y universo en el plumaje de la vida; mentira y verdad, como es el mundo. Abismo y colina, en igual medida. Retroceder a menudo hasta los patios de la infancia, justo allí donde alguien incrustó la testificación de la poesía. Y descubrir el juego otra vez… Romper la paz de la rutina y la violencia de la globalización. Modelar igualdades de hombre a mujer. Cosechar campos de estrellas y pasiones cruentas, cotidianas. Salirse de uno mismo, ser los otros. Esparcir momentos en la rueda de los días que no volverán. Aferrarse al pasa manos del minuto para intentar el milagro de la palabra. Aquí y ahora.Ëste es el cosmos. Obligarse hasta la locura en lograr el verso justo, tan necesario para quienes esperan disfrutar con él. Saberse pequeño pero útil. Una parte del todo del damero de músculos y arterias; imprescindible en la permanencia de la raza. Y cuando todo parezca perdido y sin sentido en medio del naufragio y antes que golpee el ataúd contra la tierra y desaparezca el relieve del hueso ... Volver a ser poeta.
