"Todos le cantamos al mar"
Oscar Seidel
Cuando El Gran Arquitecto creó el Universo, dejó plasmada su obra maestra en el mar. Dice el Génesis 1:10:”Y llamó Dios a lo seco tierra, y al conjunto de las aguas llamó mares. Y vio Dios que era bueno”. Desde entonces, el mar ha sido nuestra razón de ser. Nuestros primeros habitantes en el Pacifico colombiano fueron los indígenas. Hay una teoría creíble en El trabajo “Los viajeros mayas pobladores de los pastos” del escritor Harold Libardo Santacruz Moncayo, la cual dice que los primeros en arribar por canoas fueron los Mayas, quienes enviados por el rey Canek llegaron a la Isla Gorgona, desde donde divisaron las grandes montañas del Galeras, Azufral y Cumbal. Presumieron que eran tierras fértiles que les darían alimentos. para enfrentar la escases que tenían en ese momento en los territorios del Chichen Itzá. Se adentraron por los ríos de Iscuandè, El Charco y Mosquera hasta empatar con el Telembi, en lo que hoy es Barbacoas. Desde allí escalaron el piedemonte costero para encontrar las mesetas de Tuquerres e Ipiales, y terminar su periplo en Pasto, en donde se entronizaron con los Quillacingas.La otra expedición viajó por Tumaco hasta llegar al río Mataje ,fusionándose con la raza Tumac ,y posteriormente a La Tola y La Tolita en el Ecuador. Vemos que el mar fue el canal inicial que utilizaron nuestros antepasados, luego incursionaron por los ríos, hasta que la sierra los absorbió, y perdieron el rastro para regresar a la tierra de los mayas. Vestigios de su cultura y de su dialecto están reflejados en los petroglifos y orfebrería que dejaron. Luego vendrían los europeos. Fue Vasco Núñez de Balboa el que atravesó la serranía del Darién para descubrir que al oeste de Panamá había un hermoso océano al que bautizó Pacifico, o Mar del Sur. Impusieron su religión y el idioma castellano, que desde entonces lo hablamos y escribimos. Para cerrar el ciclo de migraciones, trajeron a los negros del África, quienes aportaron la fuerza física al fatigoso trabajo en las minas, en la pesca, y en la agricultura, y aunado a su alegría del baile, el misterio de la Santería, y el sonido fuerte de sus dialectos, se mezclaron con las otras razas para conformar la etnia Pacifica. En principio los indígenas y los negros se comunicaron a través de sus dialectos, pero ante la presión de los europeos terminaron hablando idioma de Castilla, entreverado con sus lenguas que hablaban de forma oculta. Esto dio origen a la culta palabra del Pacifico, la cual se difundió a través de la oralidad en montes y ríos, y en el lenguaje de los puertos marítimos y fluviales. Mucho tiempo después, se comienza a ver expresiones culturales escritas, que no dejaron olvidar sus historias y vivencias expresadas de forma oral. Es así como surge hacia la tercera década del siglo XX, una pléyade conformada por poetas, ensayistas, cuentistas, cronistas, y novelistas, quienes inspirados en el mar escribieron prosas y versos fabulosos. El mar, siempre el mar, ha inspirado a nuestros cultores de la palabra en el Pacifico, y a través del mar cantan, ofrecen amor, y claman sus desdichas de la mujer que se fue, como el rio que desemboca en el mar. Una clara expresión de cómo el mar ha influido en nuestros escritores y poetas, se palpa en la siguiente síntesis de sus respectivos géneros literarios: POESÍA 1. Helcias Martan Góngora (Guapi) Poema “Mar en la noche”: En la rivera de la noche, dice la mar profética infinitas parábolas” 2. Guillermo Payan Archer (Tumaco) Poema “El mar cambiante y eterno”: Siempre he mirado al mar, con amor y con miedo, entre la fiebre y el éxtasis, entre la sombra y el misterio”. 3. Faustino Arias Reynel (Barbacoas) Poema “De buenas con Dios”: Pero hoy, frente al mar y con ella en mis brazos mirando las olas que vienen y van. 4. Manuel Benítez Duclerc (Tumaco) Poema “Viejo Mar”: Oh! viejo mar, abuelo de mis sueños ¡conozco tu bondad y tu amargura. Para ti no hay orgullo ni bravura, todos somos inermes y pequeños. 5. Medardo Arias Satizabal (Buenaventura) Poema “Memorias de Rosa Helena”: Desde la terraza de la casa se veía el mar y el paso del autoferro; las maquinas del tren tenían nombres según el agudo de sus pitos. 6. Hugo Salazar Valdés (Condoto) Poema “El mar bifronte” i ¡Este es el mar: acuático delirio! ¡Cementerio de ríos suicidas que se buscan! ¡Lámpara torrencial de espumados sollozos! Viejo solar brumoso de obreras lejanías su barba de sal sabe circunvalar la tierra 7. Hernando Revelo Hurtado (Guapi) Poema “A mi padre”: Barquero, ese hombre que acaba de llegar a la orilla de tu rio con su baúl de mar y de fábulas y que tiene en la mirada un tatuaje de metáforas tristes es mi padre. 8. Herman “Moro” Manzi Benítez (Tumaco) Poema “Yole”: Si no hubiera sido por ti, Yole, nunca habría aprendido a besar en el fondo del mar. 9. Piedad Ayora (Tumaco) Poema “Obsesión marina”: Soy hija de este mar y mis pupilas profundas como abismos insondables, han sido manantial de aguas salobres y son tan bien como él inescrutable. 10.Helena Jiménez de Lozano (Tumaco) Poema “Soñando navegar”: Al realizar los viajes anhelados, mi pecho victorioso ha de gritar: ¡siento vivir, mis sueños han triunfado, soy marinera…..al barco y a la mar. 11. Mary Grueso Romero (Guapi) Poema ¡Que güelva mi mujé!: Hoy cuando tengo pena me voy a navegá con mi champa y mi canalete empiezo a canaletiá. Y es por esa negra que la pena me va a acabá y cojo mi atarraya y empiezo a atarrayá. La marea sube y baja y yo estoy en alta mà pensando que llego al rancho y mi negra allá no está. 12.Álvaro Benítez Acevedo (Tumaco) Poema “Soledad Marina”: Naufragando en los mares y vencida bajo un imperio de ilusiones vanas, la nave de su ser está perdida en la insondable soledad lejana. 13.José Ziadè Benítez (Tumaco) Poema “Frente al mar”: Y al morir la tarde soñando contigo frente al mar me siento solo. 14.Nila Del Castillo (Barbacoas) Poema” Currulao para Whanda”: Nací a la orilla del mar, mi casa fue una palmera, mis juegos fueron cununos y mi colchón una estera. 15.José María Obando (Tumaco) Poema “Viaje marino”: Siento que navego en las islas de ensueños, hacia el centro de un círculo radiante: el mar es liquido en donde el alma flota. 16. Felix Domingo Cabezas Prado (Barbacoas) Libro "Versos escondidos en la Costa Pacífica" 17. Octavio Montes Arango (Trujillo. Valle) Libro "Poemas de Reflexión" poema "Mar de Balboa":Mar de Balboa,Pacifico colombiano,Mar de Balboa,bello pacifico mar,tierra misteriosa,exuberante,especial. ENSAYO 1. Sofonías Yacup (Guapi) Ensayo “El Litoral Recóndito”, “El Preludio y el relámpago”: Sin embargo el mar, que dijèrase simbolizar lo grande y lo franco, no deja de ser artero. Es caprichoso, inseguro y mudable. 2. Bernardo Merizalde (España) Libro “Estudio de la costa colombiana del Pacifico”:Aquí se ve un crucifijo con dos lámparas, estando a distancia de cincuenta pasos, que más distante sólo se percibe un género de betún oleaginoso: aquí hay agua, leña, etc., es costa más alta que la de la Gorgona y llueve todo el año sin conocerse vera no. De la Isla del Gallo a Punta de Manglares diez leguas, costa baja a la mar y en su intermedio está Tumaco; es buen puerto y de toda providencia: en él hay españoles e indios: para surgir en este puerto se necesita abalizar la canal por ser variable: en este puerto hay toda providencia (menos pan, lo que sucede en todos desde Guayaquil hasta Acapulco) y también muchos bajos y piedras de los que abunda Punta de Manglares; por estos lugares se han perdido varias embarcaciones y así cuidado con la sonda desde dos leguas a la mar. 3. Teófilo R Potes (Buenaventura) Labor investigativa: “Se debe valorar su gestión desde una amplia perspectiva, que incluía una mirada antropológica e histórica con lo cual contribuyó a la construcción de la identidad propia de los habitantes del Pacífico."Por un lado está su trabajo investigativo y de difusión a través de escritos y conferencias y por otro la organización de grupos de danza y creación de un semillero para multiplicar estas experiencias. CUENTO y RELATO 1. Carlos Arturo Truque (Condoto) Cuento “Sonatina para dos tambores”: Y desde allá, bajando por las sordinas que le hacían los cueros templados de la copla bonita: Si el mar se volviera tinta y los peces escribanos, no alcanzarían a decirle lo mucho que yo la amo. 2. Oscar Benítez Del Hierro (Tumaco) Relato “Litoral Escondido”: Se iniciaban los días cuando en la madrugada el Golfo abría sus puertas de par en par en la bocana, y la noche corría su cortina de humo, sorprendiendo al mar dormido en las playas peinadas, cobijadas por la espuma. 3. Francisco Javier Alzate (Buenaventura) Cuento “Fermín Muñón”: Las olas del mar se visten de blanca mortaja al sepultar la muerte del Juradò. 4. Fernando Pinzón (Tumaco) Libro de cuentos “El país del mar”:“Con una prosa cálida que siembra raíces en los abismos marinos y se despliega por las zonas del deseo, logra en su colección de cuentos, captar con fuerza narrativa el universo de la isla de Tumaco, sus manglares, calles, playas, puentes y parques y su gente, enfrentada día a día a la violencia, pero desbocada de manera simultánea por los caminos de la ambición, el deseo y el delirio”. 5. Hernando Arcos Salazar (Tumaco) Cuento "Un día como cualquiera":Bandadas y bandadas de gaviotas recortadas contra el sol de su isla recóndita. 6. José Arroyo Ordoñez (Puerto Merizalde) Relato “Parábola de los buques viejos encallados en el olvido”: Los buques viejos se convierten en visiones fantasmales, no difíciles de identificar en cualquier punto de la costa, recostados en los esteros, a un lado de la bahía, en el refugio de una playa olvidada o deambulando libres por la inmensidad sin límites, aguas arriba o aguas abajo, según el capricho de las mareas, hasta perderse mar afuera o naufragar en su profundidad. 7. Oscar Seidel Morales (Tumaco) Libro "En el mar de sus recuerdos"cuento “Esa negra linda camarà”: Cuentan los mareños que cuando les coge la noche en el sitio donde confluye el rio con el mar, se oye el llanto de Oshun, porque Tomasa y Antonio el mareño se encuentran en la profundidad como pareja, y se convierten en Orishas. 8. Oscar Olarte Reyes (Bogotà) Libro "Prisioneros del ritmo del mar" cuento "Cleotilde y los Pianos": Las mismas aguas que vieran llegar los baúles de mercadería europea y vieran salir embarcados los cofres repletos de oro en polvo buscando el mar orientados por las estrellas del norte e impulsados por los vientos hacia la ciudad fortificada de Panamá. CRÓNICA 1. Abraham Yip Madrid (Buenaventura) “Los pescadores de la resaca”: Se estaba en puja; ese flujo de las mareas dejaba un panorama despejado, ya que las salobres aguas se habían marchado hacia otros lares. 2. Flover González Cortés (El Charco) “El hamaquero de Gorgona”: Cuando caía un rayo, lejos o cerca, se podía observar su negra silueta e inclusive la sonrisa de la mar. 3. Dagoberto Salazar Santa (Buenaventura) “Colombianito”: La bahía dormita entre nieblas de humo; los peces saltan por entre las pequeñas canoas y el puente de El Piñal es colmado de chiquillos traviesos que arrojan al mar sus anzuelos con la esperanza de pescar micuros. 4. Gabriel H Manzi Benítez (Tumaco) Crónica “Incendio”: Todos sabían que la rapacidad del incendio solo descansaría cuando llegara al mar, y quedaba todavía medio pueblo para terminar su exterminio incontenible. NOVELA 1. Oscar Collazos (Bahía Solano) Novela “Tal como el Fuego Fatuo”: Mi infancia en Bahía Solano, hasta los 7 años, son muchas imágenes confusas y hermosas. Muchas veces he creído que, por su sencillez, son lo más parecido a la felicidad: el mar, el marco de la bahía cubierto por la neblina del atardecer, la selva cercana, los juegos de niño bajo la lluvia, una humilde y grande casa de madera.... 2. Enrique Cabezas Rher (Guapi) Novela “Miro tu lindo cielo y quedo aliviado”:”Es un documento literario donde la evocación del puerto viejo, a través de una historia de amor, es el motivo convocador de múltiples metáforas sobre la vida en el trópico” 3. Arnoldo Palacios (Cèrtigue) Novela “Las Estrellas son Negras”: Por medio de sus obras, trata de plasmar, mostrar y reivindicar la cultura del Pacífico colombiano, además de denunciar los abusos e injusticias que viven sus gentes. Publicada en 1948, ha generado para su autor gran reconocimiento, otorgándole un lugar especial dentro de la narrativa colombiana, gracias a la mirada cruda y desgarradora que presenta de la realidad de un pueblo perdido en la selva del Pacífico y abandonado por el Estado. 4. Ligia Vonblon (Tumaco) Novela “Salvador el hombre que amaba el mar”: .El mar, el cielo, el paisaje se convertían entonces en una paleta de grises en busca de las sombras de la noche. Y en esas noches de Luna menguante, la visión de un cielo estrellado, un cielo que mostraba su bóveda cuajadita de joyas titilantes, las más brillantes que se puedan imaginar....En ese espacio no había nada que se interpusiese entre el mar y el cielo porque la atmosfera siempre estuvo filtrada. ! Noches Inolvidables! ". 5. Stella Estrada Mosquera (Tumaco) Novela “El doctor sin letra”: Decidieron no hablar del tema. Sentados en la arena contemplaron largo rato el mar, aquel pescador solitario cuya presencia fue testigo mudo de tantos días de pasión; y entonces volvieron a amarse. 6. William Vega Fernandez (Buenaventura) Novela “Los hombres de Rahel”: La piel retostada por el salitre de tantos años en el mar negaba su origen centroeuropeo.Extrañaba su vida de mar,ese mar que conociò huyendo de la guerra en su viejo mundo. ETNOINVESTIGACION 1. Alfredo Vanin Romero (Saija) Poema: “Islario”: Abordar horizontes es tarea de esperados herejes que vuelvan a los cantos de lidia con la impiedad del desafío. Yo sigo al mar ¡al mar! al filo de la eternidades veleidosas. 2. Pedro H González Sevillano (Guapi) Investigación y Desarrollo- Titulo: Reconstrucción histórica de la fundación de poblaciones de la Costa Pacífica colombiana 3. Baudilio Revelo Hurtado (Guapi) Libro “Ritos de Orillas “: Aplacar el mar: Cuando se presenta una tempestad muy fuerte, los marinos maldicen a Dios, a los santos, especialmente a la Virgen, esa es la manera de amansar la mar. 4. Justo Walberto Ortiz (Barbacoas) Libro “Diccionario Tumaqueño”: De todos modos, lo que se presenta con mayor interés linguistico, son los cambios semánticos, que acelerados por el contacto de los españoles con los nuevos ambientes experimentaron sus propios vocablos peninsulares traídos de ultramar. 5. Luis Antonio Biojò Cortés (Tumaco) Libro “Creencias y costumbres negras”: El Ribiel es un espanto muy peligroso que se presenta generalmente en el mar, cuando la víctima esta solitaria pescando de noche. 6. Telmo Leusson Flórez (Tumaco) Libro “Conozca a Tumaco”: Recuerdos juveniles: Y en las aguas del Pacifico mar, chogosos ansiosos de su presa, tijeretas que caen por sorpresa, cuervos que sorprenden a los peces. DECIMA 1. Benildo Castillo (Tumaco) “La Concha de Almeja” Yo me embarqué a navegar en una concha de almeja a radiar el mundo entero a ver si halla coteja. Salí de aquí de Tumaco con rumbo a Buenaventura yo no embarqué un cargamento porque la mar estaba dura. Pero embarqué quince curas un automóvil pa'andar a Guapi dentré a embarcar cien tanques de gasolina cargando en popa una mina yo me embarqué a navegar Después de navegar por este mar literario, sólo nos resta decir que La Tradición Oral se transformó en Oralidad, ésta se convirtió en Literatura Oral, y todas incidieron para que el Pacifico se escriba la culta palabra.