Cartas a Rimbaud
Arthur Rimbaud murió el 10 de noviembre de 1891, en Marsella a los treinta y siete años. Está enterrado en el cementerio de su ciudad natal, en Charleville-Mézières, situado en el noroeste de Francia.
Su influencia en la literatura moderna, la música y el arte desde André Bretón, pasando por Henry Miller, Anaïs Nin, William S. Burroughs, Pier Paolo Pasolini, Jim Jarmusch, Hugo Pratt, Mário Cesariny de Vasconcelos, Klaus Kinski, Bruce Chatwin, Penny Rimbaud, Richard Hell, los beatniks, y el mismo Jim Morrison, que está enterrado en el cementerio parisino de Père-Lachaise, y se ha convertido en la tumba más visitada. La de Rimbaud, en el pequeño pueblo de Charleville-Mézières, permaneció tranquila durante años, raras eran las visitas, pero en las últimas décadas esto ha cambiado.
En el ayuntamiento se dieron cuenta que llegaban numerosas cartas con Rimbaud como destinatario y que el cartero no sabía dónde depositarlas, por lo que crearon un buzón especial, la dirección para enviar las cartas es:
Arthur Rimbaud, cimetière de Charleville-Mézières
Las cartas llegan a su destinatario y son conservadas por Bernard Colin, el guardián del cementerio, que lleva 37 años ejerciendo este oficio, cuando llegó el antiguo guardián le confesó que nunca venía nadie a visitar su tumba, pero esto ha cambiado.
La cantante estadounidense Patti Smith, gran fan del poeta, tiene una casa desde 2017 de una casa en la aldea de Roche, cerca de Charleville-Mezieres, donde Rimbaud habría escrito Una temporada en el infierno, y es habitual que vaya a meditar en su tumba. También la visitan numerosos turistas asiáticos, chinos y japoneses, pero también europeos, especialmente los franceses.
Colin guarda todo en una caja de zapatos: cartas, poemas, colecciones de Rimbaud en todos los idiomas, platos pirograbados, CD, medallas, joyas, paquetes de cigarrillos, una botella de alcohol, un pequeño corazón de espuma roja ...