BIOGRAFÍA
En 1609 regresó a Córdoba y empezó a intensificar la tensión estética y el barroquismo de sus versos. Entre 1610 y 1611 escribió la Oda a la toma de Larache y en 1613 fábula de Polifemo y Galatea, un poema en octavas que parafrasea un pasaje mitológico de las Metamorfosis de Ovidio; el mismo año divulgó en la Corte su más ambiciosa obra: las Soledades. Estos poemas desataron una gran polémica a causa de su oscuridad y afectación, e iniciaron culteranismo, un término que poseyó en su origen carácter burlesco, formado a partir de la palabra culto y que, de hecho, supuso la fase final de la evolución de la poesía renacentista española. Los literatos de la época quedaron de este modo artificialmente enfrentados entre culteranos (Salvador Jacinto Polo de Medina, fray Hortensio Félix Paravicino, Francisco de Trillo y Figueroa, Gabriel Bocángel, el Conde de Villamediana, sor Juana Inés de la Cruz) y conceptistas, como Francisco de Quevedo, ya que la crítica posterior ha visto en el culteranismo simplemente una evolución extrema del conceptismo.
Las Soledades es su obra de mayor aliento y de plan más madurado. Góngora proyectaba cantar las soledades de los campos, de las riberas, de las selvas y de los yermos. Quedaron inacabadas pero constituyen una de las cumbres de la lírica de todos los tiempos.
De esta época es también el Panegírico al duque de Lerma, escrito en 1617.
Lo cierto es que Góngora revolucionó la forma poética, pero cultivó todos los géneros. Para algunos es el autor de los más bellos sonetos que se han compuesto en lengua castellana.
Felipe III lo nombró capellán real en 1617; para desempeñar tal cargo, vivió en la Corte hasta 1626. Velázquez lo retrató con frente amplia y despejada, y por los pleitos, los documentos y las sátiras de su gran enemigo, Francisco de Quevedo, sabemos que era jovial, sociable, hablador y amante del lujo y de entretenimientos como los naipes y los toros, hasta el punto de que se le llegó a reprochar frecuentemente lo poco que dignificaba los hábitos eclesiásticos.
En 1627, perdida la memoria, volvió a Córdoba, donde murió el 23 de mayo de una apoplejía, en condiciones de extrema pobreza.
El rechazo de gran parte de la crítica al culteranismo siguió durante siglos y no fue hasta finales del SXIX que los poetas simbolistas, Verlaine a la cabeza, y los poetas modernistas de lengua española rescataron el valor del gongorismo, lo que tuvo su cenit en la generación del 27,(Jorge Guillén, Pedro Salinas, García Lorca, Alberti) que debe su nombre en el tercer centenario de la muerte del insigne poeta, que culminó con la publicación de la edición critica de las Soledades y de la Fábula de Polifemo y Galatea por parte de Dámaso Alonso.
BIBLIOGRAFÍA
Obra poética:
No vio sus obras publicadas en vida, aunque lo intentó en 1623, pero éstas pasaron de mano en mano en copias manuscritas que se coleccionaron y recopilaron en cancioneros, romanceros y antologías.
Las ediciones críticas acostumbran a clasificar su obra en:
Poemas menores: romances y sonetos.
Poemas mayores:
Oda a la toma de Larache (1610)
Fábula de Polifemo y Galatea (1612)
Soledades (1613).
Panegírico al duque de Lerma, escrito en 1617
Teatro:
Las firmezas de Isabela (1613)
Comedia venatoria
El doctor Carlino
ENLACES
http://www.brown.edu/Departments/Hispanic_Studies/gongora/indice.htm
http://www.los-poetas.com/h/gongo1.htm
http://www.poesia-castellana.com/gongora.html
http://www.cervantesvirtual.com/FichaAutor.html?Ref=126
http://www.poesia-inter.net/indexlg.htm
http://www.bibliele.com/gongora/
http://sonnets.spanish.sbc.edu/Gongora_CLXVI.html
http://www.uv.es/~ivorra/Gongora/Gongora.htm
http://www.geocities.com/revistaversoados/webpoemas/webpoemarios/gon-soledades.htm