Etimología de la palabra Broma
"Broma" proviene del griego y se refería al teredón o broma, este era un molusco marino que se adhería en la madera del casco de los barcos y la iba carcomiendo lentamente. Cuando se adhiere es minúscula pero en pocas semanas puede llegar a medir diez centímetros, los pequeños agujeros permitían que el agua se introdujera en el casco y los barcos resultaban muy pesados. Poco a poco fue derivando su empleo y se utilizaba para cualquier acto que abrumase a alguien. En este sentido emplean la palabra Quevedo o Tirso y actualmente en América sigue utilizándose en la variante de molestia más o menos desagradable y dañosa’.
En 1726, el Diccionario de Autoridades de la Academia registraba broma como: «Phrase con que metaphoricamente se dáà entender, no solo el que es pesado y molesto en su trato y conversacion, sino otra cualquiera cosa, que excéde notablemente de lo que le corresponde».
Inicialmente broma se empleaba no como algo cómico sino solo para lo que hoy en día llamamos una broma pesada. Fue a finales del s. XVIII que broma tomó el significado de ‘algazara, chanza’ y en el segundo cuarto del s. XIX, el de ‘bulla, diversión’, el que ha llegado hasta la actualidad.