Muerte de Neruda
Pese a que el poeta chileno Pablo Neruda sufría cáncer de próstata con metástasis avanzada, un grupo de peritos reunido en Santiago ha determinado esa no fue la causa de su muerte, acaecida doce días después del golpe de Estado de 1973 perpetrado por Augusto Pinochet.
Se trata de una conclusión unánime a la que han llegado dieciséis expertos de Europa y América reunidos por el juez chileno Mario Carroza, encargado de investigar la muerte del premio Nobel de Literatura. Aurelio Luna, doctor de la Universidad de Murcia y portavoz de los expertos, declaró que: «El estudio de todos los antecedentes nos permite de forma rotunda establecer al cien por cien la ausencia de caquexia».
Para investigarlo fue necesario exhumar sus restos en tres ocasiones y convocar dos paneles de especialistas internacionales. Sin embargo, para demostrar la causa exacta de la muerte hará falta que transcurra al menos un año ya que las muestras obtenidas en la exhumación del cuerpo en 2013 todavía están analizándose en laboratorios de Dinamarca y Canadá.
En cualquier caso, esta conclusión de los expertos ya permite demostrar la no validez del certificado de defunción entregado el 23 de septiembre de 1973 por la Clínica Santa María, donde estaba internado.
De momento, las investigaciones se centran en la presencia en las muestras de la toxina mortal estafilococo dorada, que podría haber sido administrada externamente con una finalidad criminal.
El juez Mario Carroza investiga el caso desde hace siete años, basándose en le testimonio del exchófer de Neruda, Manuel Araya, que siempre afirmó que el poeta había sido envenenado.