Fabra i Poch, Pompeu

Pompeu Fabra i Poch nació en Gracia, Barcelona, el 20 de febrero de 1868. Realizó estudios de ingeniería pero su verdadera vocación fue siempre la filología. En 1891 la editorial “L'Avenç” publicó el Ensayo de gramática de catalán moderno, en el que por primera vez se describía la lengua hablada con trascripción fonética. En la revista l’Avenç, y junto con Joaquim Casas y Jaume Massó, empezaron una campaña lingüística que desató grandes polémicas y resultó fundamental para la futura normalización de la lengua catalana.
En 1902 ganó la cátedra de química de la Escuela de ingenieros de Bilbao, y se trasladó a vivir allí hasta 1912. En estos años, sin embargo se intensificó su dedicación a la Filología catalana, y en 1906 participó en el I Congrés Internacional de la Llengua Catalana. Prat de la Riba le encargó dirigir la normativización lingüística y esto le permitió volver a Cataluuña donde fundó la Secció Filològica de l’IEC y ocupó una cátedra de los Estudis Universitaris Catalans.
El 1912 apareció la Gramática de la lengua catalana y en 1913 las Normes ortogràfiques (1913).
Uno de los puntos cruciales de la ortografía defendida por Pompeu fue el respeto por la pronunciación dialectal y la etimología de las palabras. Esto le llevó a desarrollar el Diccionari Ortogràfic que apareció en 1917.
A partir de 1918 se publica la Gramàtica Catalana y se adopta como norma oficial del catalán. En 1932 aparece el Diccionari general de la llengua catalana que le valió para acceder directamente a la càtedra de llengua catalana de la Universitat de Barcelona. En 1939 tuvo que exiliarse a causa del fin de la guerra civil española, residió en París, Montpelier, Perpiñan i Prada de Conflent, donde murió el 25 de diciembre de 1948.
A título póstumo Joan Coromines publicó la nueva Gramàtica catalana que apareció en 1956.